El estrés asociado al uso de nuevas tecnologías

La Tecnoadicción:

Como su nombre lo indica, con el término Tecnoadicción nos referimos a la adicción o uso intensivo y abusivo de los avances tecnológicos.

Se puede decir que se está comenzando a traspasar la frontera entre el uso normal de la tecnología y la adicción, cuando dicho uso comienza a sustituir otras actividades: amigos, estudio, familia, sueño, entre otros.

Según la Dra. Marisa Bosqued (2000), algunas de las características de un tecnoadicto son:

1. Escasas relaciones sociales, con tendencia al retraimiento y la introversión y dificultades en el contacto interpersonal.
2. Dificultad en el control de los impulsos.
3. Limitada capacidad de empatía, es decir, de ponerse en el lugar del otro.
4. Baja autoestima.
5. Escaso interés en el estudio, que frecuentemente se traduce en fracaso, y más tarde en abandono de la vida académica.
6. Familia conflictiva, con historias de separación conyugal, alcoholismo, malos tratos, etc.
7. Haber padecido una anterior adicción.
8. Insatisfacción vital.

Ahora bien, qué podemos hacer para combatir la Tecnoadicción. Este tratamiento requiere la intervención de la familia del “enfermo” y de la ayuda profesional. Algunas pautas recomendables son:

• Establecer un tiempo límite de conexión a la red.
• Intentar recuperar a las personas y actividades que fueron relegadas por la adicción.
• Proponer al individuo diferentes alternativas del uso del tiempo.
• Buscar fuentes alternativas de información: periódicos, revistas, libros.

Hemos visto los peligros y riesgos que conlleva el uso excesivo y abusivo de las nuevas tecnologías, sobre todo en cuanto a nuestra capacidad de convivencia y de interrelacionarnos.

Espero que estas reflexiones y sugerencias te sean útiles, y, si es tu caso, recuerda que siempre estamos a tiempo de “curarnos”, lo principal es tener la disposición para hacerlo.

Hasta nuestro próximo café.